UNESCO: Petroglifos de Isla de Pascua podrían caer al mar
Los petroglifos y los moais de Rapa Nui corren riesgo de desaparecer del mapa. Así lo aseguró el último informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) que precisó que las condiciones de clima extremo se están convirtiendo en el principal riesgo para sitios considerados Patrimonio de la Humanidad como los que están en la Isla de Pascua.
“Algunas estatuas de la Isla de Pascua están en riesgo de quedar destruidas por el mar debido a la erosión en las costas. El cambio climático podría llegar a que algunos sitios pierdan su condición de patrimonio mundial”, aseguró Adam Markham, autor principal del reporte y subdirector de la Unión de Científicos Preocupados (Union of Concerned Scientists, UCP).
Según el informe, el impacto del cambio climático en Rapa Nui se proyecta sobre la escasez de agua por la reducción de lluvias, subida del nivel del mar, inundaciones y la erosión de la costa en donde se encuentra gran concentración de atracciones arqueológicas.
Petroglifos ¿al agua?
“El calentamiento global en la isla lo venimos monitoreando desde hace años”, lanza el alcalde de Rapa Nui, Pedro Edmunds Paoa, y explica que “hay varios sitios arqueológicos en peligro, pero uno en particular: Orongo y sus petroglifos, único sitio de esta naturaleza en el planeta”, al sur-oeste de la isla, en la cima del volcán Rano Kau.
“Es toda la aldea ceremonial donde se realizaba la ceremonia ancestral del Hombre-Pájaro. Hay petroglifos que están al borde del volcán y con riesgo de caer al mar”, precisa Paoa y da las razones de la preocupación local.
“Con el calentamiento global ha aumentado el mar y con esto el nivel donde golpean las olas. Por el lado acantilado mar, hay socavones porque las olas ya no golpean la roca, sino que lo hacen contra la pared de tierra de un acantilado de más de 400 metros de altura en cuya cima están los petroglifos de Orongo. Ya estamos sufriendo el problema porque, en el mismo sector, se vinieron abajo toneladas de tierra que taparon un ahu (plataforma ceremonial con moais donde se rendía culto a los ancestros). Para fortalecer la gigantesca muralla, en términos de números, es una inversión no menor a cien millones de dólares (68 mil millones de pesos). ¿De dónde se saca esa cantidad? Chile tiene recursos, pero no para este efecto”, comenta el alcalde.
“El tema está estudiado, lo que falta es hacer la inversión”, se lamenta.
Operación traslado
Germán Icka Pakarati, dirigente de la Asociación Indígena “E Toru Hanua Nua Mea” aporta que “va a ser súper difícil parar ese cerro donde están los petroglifos. Si el agua socava el acantilado se va a llevar ese tremendo cerro que va a ir a parar al agua.
"En Orongo hay evidente deterioro. Lo ideal sería trasladar todo este patrimonio a otro lugar antes que se caiga. Hay que invertir”.
¿Qué dice CONAF?
Fernando Aizman, gerente de Áreas Silvestres Protegidas de la Corporación Nacional Forestal (CONAF) dice que la aldea ceremonial es uno de los sitios arqueológicos emblemáticos del parque Nacional Rapa Nui, administrado por CONAF desde la década del 70.
“El acantilado, como formación geográfica, es muy dinámico y siempre hay desprendimiento de tierra y más todavía con el proceso natural del cambio climático con precipitaciones más abundantes en periodos de tiempo más cortos genera más erosión”, asegura Aizman.
Agrega que “hemos constatado desprendimiento y movimiento de suelo, pero la zona donde están los petroglifos está sin acceso de público. Los sectores donde están los petroglifos todavía no están en riesgo de caerse y los estudios nos indican que hay que hacer inversión importante para contener esa degradación natural del cerro, inversión que no está cuantificada todavía. El sitio no se va a desprender en el corto plazo y los estudios dicen que hay que tomar medidas”.
Y remata: “Somos conscientes que el cambio climático es un proceso global que se nos viene y estamos tomando medidas de protección”.
Fuente: Las Últimas Noticias